Según la denunciante, todo ocurrió cuando ella se encontraba en estado de indefensión por quebrantos relacionados con la covid-19 y el lupus.
El sujeto se habría aprovechado de su cercanía con la familia de la menor, para accederla en repetidas ocasiones.
La víctima tenía solo 13 años y acudía para ser examinada porque recientemente había sufrido otro caso de abuso sexual.
Las autoridades ofrecen una recompensa de $10 millones por información que permita dar con la captura del agresor.