Despidos y burocracia de Harman estarían afectando la Reforma Agraria

La Agencia Nacional de Tierras (ANT) está en el ojo del huracán tras despidos masivos de contratistas y la incorporación de nuevas cuotas burocráticas, lo que está afectando los procesos misionales de la entidad.

Según la Asociación de Trabajadores Independientes (ATI), más del 75 % de los 4.000 contratistas salieron sin justificación y en su reemplazo llegaron personas cercanas al director Felipe Harman, exalcalde de Villavicencio, y recomendadas por padrinos políticos.

Los nuevos contratistas, en su mayoría provenientes de Villavicencio, han firmado millonarios contratos que superan los montos recibidos por los antiguos empleados, a pesar de no tener experiencia en asuntos de tierras. Esta situación genera un gran malestar interno y externo, afectando la continuidad de los procesos de entrega de tierras y títulos a campesinos, indígenas, raizales y palenqueros.

Despidos masivos y clientelismo

Una excontratista, que prefirió mantener su anonimato, expresó a El Colombia su indignación por la desvinculación masiva. “Este director dejó sin contrato a más del 75 % de los contratistas que veníamos laborando en la entidad desde años anteriores. Esto, porque, como exalcalde de Villavicencio, se dedicó a traer a la gente que había trabajado con él en su administración, a poner personas que no tienen las herramientas técnicas para sacar adelante la Reforma Agraria».

Harman vive una encrucijada al frente de la Agencia Nacional de Tierras

A esto se suman los señalamientos de corrupción y clientelismo, con contrataciones millonarias de personas cercanas a políticos como el exgobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, y el exalcalde de Santa Rosa de Cabal, José Rodrigo Toro Montes.

Las nuevas incorporaciones han puesto en riesgo los procesos misionales de la ANT, según denuncias de excontratistas, quienes aseguran que la entidad está siendo utilizada como un fortín político.

Además de estos cuestionamientos, Felipe Harman enfrenta denuncias por presuntas irregularidades durante su mandato en Villavicencio, incluyendo la entrega de tierras a falsas víctimas del conflicto armado y acusaciones de acoso sexual. Estas denuncias se suman a los problemas actuales de la ANT, agravando la crisis en la entidad encargada de la Reforma Agraria.