Laura Sarabia, la ‘consentida’ del Gobierno, renunció por diferencias con Petro

La carrera meteórica de Laura Sarabia en el Gobierno de Gustavo Petro terminó con una carta de renuncia que ella misma hizo pública este 3 de julio.

En el documento dirigido al presidente, la ahora exministra de Relaciones Exteriores aseguró que no comparte decisiones adoptadas recientemente por el jefe de Estado y que, por coherencia personal y respeto institucional, no podía seguir acompañando el proyecto.

Su salida se produce en medio de la polémica por la licitación de los pasaportes, luego de que el presidente desautorizara públicamente su decisión de prorrogar por once meses el contrato con la empresa Thomas Greg & Sons, actual encargada de ese servicio.

Sarabia había declarado una nueva urgencia manifiesta con el argumento de que el contrato vence el 31 de agosto y no hay tiempo suficiente para ejecutar el nuevo modelo de contratación. Sin embargo, Petro intervino directamente y anunció que, a partir del 1 de septiembre, la expedición de pasaportes será asumida por la Imprenta Nacional de Colombia, en alianza con la Casa de la Moneda de Portugal.

En estos tres años, Sarabia pasó por el DAPRE, el Departamento de Prosperidad Social, la Jefatura de Gabinete y, finalmente, la Cancillería. Ningún otro funcionario tuvo tanto poder en tan poco tiempo, lo que muchos atribuyen a la información privilegiada que tiene del presidente.

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“Mi renuncia es el resultado de una reflexión profunda, motivada por la responsabilidad que siento con mi conciencia, con el país y con la forma en que entiendo el ejercicio del poder público”, escribió Sarabia, sin mencionar directamente el episodio de los pasaportes.

Por ahora, el Gobierno no ha anunciado quién reemplazará a Sarabia y tampoco Petro se ha pronunciado públicamente sobre el hecho.