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«Se me fueron las palabras»: gobernador del Meta
El Gobernador del Meta reconoció que su propuesta de arrollar delincuentes estuvo motivada por el sentimiento de indignación.
En entrevista para Caracol Radio, el gobernador Juan Guillermo Zuluaga reconoció que se dejó llevar por las emociones al proponerle a los ciudadanos que, si son testigos de un delito intervinieran con su vehículo para arrollar a los delincuentes.
«se me pudieron haber ido las palabras, se me fueron las palabras».
La particular sugerencia del mandatario metense incluía que la Gobernación brindara toda la asesoría jurídica necesaria para evitar que los intervinientes tuvieran problemas con la justicia.
A propósito y preguntado por los periodistas, el mandatario aseguró, «depronto el sentimiento actuó mucho más porque es que ya son muchos los casos (…) se me pudieron haber ido las palabras, se me fueron las palabras».
Y es que Zuluaga se vio en serios problemas cuando le transmitieron la pregunta de un oyente que escudriñaba sobre el rubro la ley que amparaba la inversión de recursos en la defensa jurídica de cada persona que se meta en líos por intentar defenderse o defender a alguien.
Ante el cuestionamiento Zuluaga reconoció que no hay una asignación presupuestal para ese fin y que su propuesta hacía referencia únicamente a los gastos de asesoría.
«Yo no voy a invertir recursos específicamente para eso, pero prestarle toda la asesoría y el acompañamiento con nuestros profesionales, o uno mismo, eso no tiene por qué tener un alto gasto para el Estado, ni estoy diciendo que voy a disponer de recursos para eso», dijo el mandatario.
Un «llamado desafortunado» que invita a actuar, no en legítima defensa, sino en autodefensa, y que podría cobrar muchas vidas inocentes.
Francisco bernate
En otro escenario, el renombrado abogado penalista, Francisco Bernate, calificó este como un «llamado desafortunado» que invita a actuar, no en legítima defensa, sino en autodefensa, y que podría cobrar muchas vidas inocentes.
Según Zuluaga, lo que pretendía con esta propuesta era despertar el sentido de solidaridad entre los ciudadanos y fomentar el trabajo articulado con las autoridades.
El mismo día que lanzó esa idea, el gobernador se arriesgó incluso a decir que si era necesario, asumía con su propio bolsillo los gastos de reparación de los vehículos que resultaran afectados. Luego de sus últimas declaraciones, todo fue declinado.
