Comunidades amenazadas por el río Ariari

Graves emergencias y desbordamientos hacen parte del oscuro panorama que se vive cada año cuando las lluvias van tomando fuerza en el departamento del Meta. Pobladores saben que, si las precipitaciones se hacen constantes, el Ariari aumentará su fuerza y con él un peligro latente.

Caños como el de Aguas Claras, Caño Seco y Aguas Zarcas suelen también incrementar su caudal, acabando de esa forma con la calma de las comunidades de las veredas cercanas en municipios como El Dorado que pierden cultivos y enseres debido a las inundaciones.

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Las crecientes súbitas del Ariari son otro de los detonantes de las emergencias. La más reciente ocurrió el pasado jueves, cuando el afluente superó los tres metros, afectado por lo menos a 32 familias y 50 hectáreas de cultivos.

Plátano, maíz, aguacate, maracuyá, papaya, yuca, cacao, tomate, entre otros fueron arrasados por el agua, significando una grave pérdida para los campesinos que cultivaron con esfuerzo, invirtiendo no solo tiempo, sino también dinero que muchos de ellos quedan debiendo a los bancos.

Ante las dificultades que afrontan, los ciudadanos han extendido en reiteradas ocasiones el llamado al gobierno departamental y nacional con el fin de que se generen estrategias de mitigación y que brinden una solución definitiva al problema.

Han sido diversas las promesas y los compromisos pactados, entre las últimas reuniones que involucran al gobierno nacional y las comunidades, se encuentra la visita al Meta de delegados de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo donde se dio a conocer que se harían inversiones superiores a los 41 mil millones para obras de mitigación.

El anuncio fue bien recibido por los habitantes de Guamal, El Castillo y El Dorado, municipios que se verán beneficiados, sin embargo, pobladores hicieron énfasis en la necesidad de ser tenidos en cuenta para socializar los trabajos a realizar y lograr así que los recursos se inviertan correctamente.

Finalmente, la petición de los ciudadanos fue principalmente que les cumplan con los acuerdos y que su pensar no sea ignorado, ya que son ellos realmente quienes conocen de fondo lo que sucede con el río, los que han sufrido y los que han tenido que perder el fruto de su esfuerzo.

El río Ariari ha causado recientemente afectaciones en el municipio de El Dorado. Según lo indicado por los organismos de socorro, en el último mes por lo menos 96 personas han resultado afectadas y se han generado daños en cerca de 40 hectáreas entre cultivos, potreros y bosques de las veredas Santa Rosa baja, Aguas Zarcas, La Isla sector 1 y 2, el barrio Upín y la inspección de San Isidro.

En el municipio de El Castillo se reportó el desbordamiento del río Cumaral en la vereda Aguas Claras, afectando cultivos y obras de mitigación. Se perdieron cerca de dos hectáreas de plátano, tres de yuca, cuatro de aguacate y tres de maíz.

Las obras de mitigación sobre el puente del río La Cal se vieron afectadas en un 100%. Yesenia Moreno, habitante de El Dorado, indicó que se trata de una problemática muy grave de todos los años “debido al desbordamiento del río Ariari hacia la margen derecha, se nos ha llevado muchos cultivos y viviendas”, puntualizó.

Como ella, muchos pobladores deben enfrentar cada año la incertidumbre de no saber si el río se les va a llevar de nuevo lo que con tanto esfuerzo han construido. Ante esta problemática que los afecta, el representante de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo en una reciente visita al Meta informó que se realizarán inversiones que superarán los 41 mil millones para obras de mitigación que permitan enfrentar la temporada invernal.

Lo anterior, aunque genera una esperanza a los pobladores, también causa preocupación a pobladores como Tomás Rojas, quien afirmó que es obligación de los gobiernos atender a la comunidad que paga sus impuestos y brindarles solución a sus necesidades.

“A nosotros nos duele Guamal porque el río se nos está llevando nuestras propiedades. Es muy fácil ver los toros desde la barrera, si no se descolmata el río todos los trabajos van a ser perdidos, aunque no quiero ser profeta de mal agüero”; expresó Tomás.

El representante de Gestión del Riesgo concluyó que por fin llegará la solución definitiva al drama de tantas familias que incluye a campesinos que lo han perdido todo y solo han quedado con deudas luego de que la fuerza del agua destruyera lo que hay a su paso.

Fuentes consultadas:

• Gobernación del Meta
• UNGRD
• Ciudadanía municipio Guamal y El Dorado