A solo seis meses de la fecha en que debía entrar en operación el puente de Chirajara, cuya construcción aún no inicia, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) propuso cambiar su diseño.
Según el vicepresidente de la entidad, Carlos García, la idea es que pase de ser un puente atirantado a uno de voladizos sucesivos. Esta tipología es la misma del puente de Pipiral, que es incluso más extenso.
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García explicó que lo que se busca con esto es no utilizar la cimentación existente de la anterior estructura, dado que «generó muchas dudas sobre el procedimiento de construcción, al haber intervenido en este tres contratistas: Tradeco, que inició el puente atirantado; Coviandes, que avanzó cuando le terminó el contrato a la primera, y Gisaico, que hizo las obras», dijo el funcionario.
Por su parte, el presidente de la entidad, Manuel Felipe Gutiérrez, sostuvo que esa propuesta todavía no se ha acordado con la concesionaria Coviandes, pero se espera que se logre en las próximas semanas.
Este puente, del que no se ha puesto una sola roca, tenía que estar funcionando en marzo de 2021, pero las diferencias entre el constructor y la interventoría han impedido que se reactiven las obras.
La estructura inicial del puente de Chirajara colapsó en uno de sus extremos el 15 de enero de 2018, dejando un saldo de nueve trabajadores muertos.