La Superindustria encontró que todos se aliaron para remover al presidente ejecutivo que venía promoviendo la recuperación de la entidad.
El pago efectivo le generará al comerciante un descuento del 5% en la renovación de su proceso.
El ente regulador ordenó la suspensión de seis directivos culpables de la crisis que atravesó la entidad gremial.
Esta vez la entidad habría incurrido en violaciones al régimen jurídico de Habeas Data, es decir, manejar información de los usuarios sin autorización.
Por lo pronto, la entidad queda en manos de la Junta Directiva que sesiona en Bogotá en la sede de la Superintendencia de Industria y Comercio.